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martes, 2 de agosto de 2016

357 * #CasoPráctico "Hatwo" (problemas de la #organización #divisional) #CasoPrácticoEEC

Joaquim-Andreu Monzón Graupera

Universitat de Barcelona


En esta entrada publico el caso práctico "Hatwo" cuyo enunciado está inspirado en una descripción escrita por el prof. José Antonio Colino, del Instituto de Empresa en Madrid.

"Hatwo" (dos sombreros) alude a la necesidad de que un subordinado en el contexto de una organización divisional deba soportar la supervisión, las críticas, los intentos de cambio de prioridades y absorción que generan dos jefes, normalmente uno jerárquico (que determina qué hay que hacer y el status, la valoración del trabajo y las primas por objetivos); y otro de tipo funcional, que fija "cómo" debe realizarse el trabajo, para que obtenga un marchamo de calidad homologable al de otros departamentos de corte similar situados en áreas o países distintos.

Normalmente los puestos regidos por una organización divisional, en la práctica tienen los mismos problemas que las organizaciones matriciales.

En estas últimas la cosa se complica cuando sus puestos de trabajo deben reportar a tres, cuatro... cinco jefes distintos. Recuerdo que los responsables de Corning Glass Works Co., afirmaban tener una organización matricial en la que los subordinados podían depender de cuatro o cinco jefes.

También es cierto que ésta es una organización compleja y en épocas de crisis las empresas reconocen que no pueden pagarla, por lo que la necesidad simplifica enormemente el entramado de relaciones organizativas con dobles y triples dependencias, o más.

En el fondo una organización matricial con cuatro, cinco, seis jefes para cada subordinado, no deja de ser el reflejo de la organización funcional de Taylor, que fracasó cuando los obreros se negaron a recibir órdenes de más de un jefe (en concreto, Taylor tenía planificados siete capataces para cada obrero (con órdenes muy especializadas de cada uno de ellos).

Los directivos norteamericanos -especialmente- están muy curtidos en la gestión de organizaciones matriciales complejas. Toleran la ambigüedad mejor que sus homólogos europeos y no se ponen nerviosos a las primeras de cambio cuando surgen dificultades de falta de tiempo y de cambios de prioridades. Una organización matricial exige para su éxito, dialogar mucho y negociar más.

En este caso estamos limitados a los problemas de las organizaciones divisionales, que normalmente son matriciales con doble dependencia.

El enunciado puede consultarse aquí:

357. a.    goo.gl/XdTpOc

Y la solución que construimos en su momento, aquí:

357. b.   goo.gl/KsnCAV